El cierre del gasoducto Magreb-Europa (GME) el pasado 31 de octubre supone un grave contratiempo para la recuperación económica de España. Tras la visita de la delegación española liderada por la vicepresidenta Teresa Ribera a Argelia, el escenario energético sigue siendo incierto y forzará al Gobierno español a buscar alternativas para garantizar el suministro energético este invierno.

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