Comunicado
El descenso es especialmente relevante desde 2022, entre otras razones por una gestión energética más eficiente y por la implantación de diferentes fórmulas de autoconsumo
Según datos de Redeia analizados por el Foro Industria y Energía (FIE) y el instituto de investigación social Opina 360, la demanda de energía eléctrica de la mediana y gran industria española a la red eléctrica lleva descendiendo de manera casi ininterrumpida desde el año 2018. Esta disminución ha sido especialmente relevante durante los años 2022 y 2023, en los que el descenso respecto al indicador de referencia del año 2010 es de un 13,4 % y un 18,3 % respectivamente.
El análisis examina exclusivamente los datos de demanda de electricidad a la red de aquellas industrias manufactureras que tienen contratada la tarifa 6.1, es decir, con una potencia superior a 450 Kw (medianas o grandes).
A partir de estas cifras, el Foro Industria y Energía ha consultado a distintos expertos una serie de cuestiones relacionadas con la gestión energética y el desarrollo industrial:
¿Significa este descenso que la industria consume cada vez menos electricidad?
No. Lo que sucede, al menos desde el año 2022, es que la gestión energética de la industria es más eficiente y además obtiene una parte de dicha energía fuera de la red eléctrica, en especial, mediante el uso de diferentes fórmulas de autoconsumo. Desde este año, se produce un descenso muy acentuado de la demanda de electricidad a la red, que llega a alcanzar el 18,3 % en 2023. Sin embargo, este descenso coincide con un incremento del Valor añadido bruto (VAB), el indicador de la actividad económica que refleja el valor total de todos los bienes y servicios producidos menos el valor de los utilizados para el consumo intermedio en su producción (Ver gráfico 1). Se da, por tanto, la situación de que, aunque aparentemente hay menor demanda de electricidad, crece el volumen de los bienes producidos, lo que hace suponer que la industria sigue utilizando niveles similares de energía eléctrica que obtiene a través de medios alternativos a la red.
Gráfico 1: Comparativa de la evolución del Valor añadido bruto (VAB) y del Índice de Red Eléctrica (IRE)-Gran industria
Fuente: Opina 360 a partir de datos de Red Eléctrica.
¿Se ha “roto” la relación entre el incremento del consumo eléctrico y el desarrollo industrial?
No. Lo que ha cambiado es una parte del origen de la energía utilizada y la eficiencia de la gestión energética. La industria es cada vez más eficiente, aplica soluciones de ahorro energético y tiene otras fuentes de energía disponibles.
¿Está creciendo la mediana y la gran industria española?
Sí, pero con muchos matices. El VAB de la mediana y gran industria ha vuelto en 2023 a niveles similares a los de 2017 tras muchos años de descenso debidos, entre otras razones, a la crisis de 2008, pero crece por debajo del conjunto de la economía.
Así, mientras la producción de la mediana y gran industria crece un 8,9 %, el PIB lo hace un 13,3 % (ver gráfico 2). Y este dato es aún más relevante si lo comparamos con el ascenso de los servicios, que crecen un 21,5 % (ver gráfico 3). La mediana y gran industria manufacturera española crece, pero lo hace a menor ritmo que la economía y a mucho menor ritmo que los grandes servicios.
Gráfico 2: Comparativa de la evolución del PIB nacional y del Índice de Red Eléctrica (IRE) – Grandes consumidores
Fuente: Opina 360 a partir de datos del INE y Red Eléctrica.
¿Es generalizado el descenso de la demanda energética a la red o se da solo en la mediana y gran industria?
Sí. La demanda a la red desciende en todos los sectores empresariales de medianas y grandes empresas, según los datos de Redeia. Sin embargo, hay diferencias sustanciales entre ellas. Mientras la demanda industrial a la red ha descendido un 18,3 % respecto al indicador de 2010, la de los grandes servicios se ha ido reduciendo en los últimos años hasta igualarse al nivel de 2010. Una posible lectura es que la industria aplica antes las medidas de eficiencia energética y el autoconsumo.
Gráfico 3: Comparativa de la evolución del VAB y del Índice de Red Eléctrica (IRE)-Servicios
En vista de estos datos, ¿sigue siendo necesaria la mejora de la red eléctrica?
Sí. No debe perderse de vista que una de las funciones de la red eléctrica es garantizar la seguridad energética de la industria, es decir el acceso a la energía eléctrica. Independientemente de la demanda, la mejora de la red eléctrica es necesaria desde varias perspectivas.
En primer lugar, es previsible que la demanda de energía eléctrica en la mediana y gran industria repunte con el proceso de electrificación. Prueba de ello es el aumento de acuerdos PPA off site (España es líder en este sector). De hecho, en los primeros meses de 2024 se está produciendo por primera vez desde 2017 el incremento interanual de la demanda de energía eléctrica a la red por parte de este tipo de industrias (sin tener en cuenta los datos relacionados con la pandemia de la Covid-19).
En segundo lugar, es necesario un análisis desde el ángulo más local. Aunque Redeia no facilita datos por autonomías, es evidente que la situación no es igual en las diferentes CC AA y no todas tienen el mismo nivel de demanda. La red tiene que garantizar que la energía de origen renovable llega, precisamente, a aquellas industrias situadas en lugares en los que existe demanda energética pero hay más dificultades de generación o acceso a soluciones de autoconsumo a escala industrial, como puedan ser los entornos de grandes concentraciones metropolitanas como Madrid, Barcelona o Valencia.
¿Tiene el autoconsumo de la gran industria un “techo de cristal”?
Probablemente, sí, pero aún es pronto para saberlo y para cuantificarlo. En las diferentes actividades que el Foro Industria y Energía ha organizado, en las que han participado importantes empresas industriales, la mayoría de ellas han afirmado que el autoconsumo les permite cubrir entre el 15 y el 25 % de sus necesidades energéticas. Obviamente, dependerá mucho de las empresas y de sus recursos: mientras hay empresas que pueden acceder a PPA on-site con conexiones directas o construir grandes parques fotovoltaicos en sus terrenos, otras deben limitarse a sus tejados. Esta coincidencia entre los datos expuestos por empresas de diferentes sectores y ubicaciones invita a pensar que existe un límite de energía eléctrica autogenerada que no utiliza la red, aunque solo sea por el simple hecho de sus horarios. Esta cuestión hace, de nuevo, indispensable la mejora en la red eléctrica.
Nota Final
Las reflexiones anteriores pretenden abrir el debate y aportar ideas que puedan ser útiles, pero, obviamente, están abiertas a comentarios y correcciones. Agradeceremos cualquier opinión o apreciación que contribuya a mejorarlas en el correo info@foroindustriayenergia.com