• El proceso de transición energética hacia la electrificación no puede entenderse desde una perspectiva coyuntural: debe verse como una maratón, no como un sprint.

  • Representantes de las compañías industriales Roca y Alier expondrán sus soluciones y Nedgia analizará el papel que puede jugar el biogás en el proceso de descarbonización industrial.

  • La difícil electrificación no supone renunciar a la electrificación, sino buscar las soluciones adecuadas en cada momento, como demuestra la iniciativa de hornos eléctricos de Roca.

  • La mesa redonda “Alternativas renovables en procesos industriales de difícil electrificación”, tendrá lugar el miércoles 4 de junio, de 15:00 a 16:00 horas, en la Sala Serveo del recinto ferial La Farga de L’Hospitalet (Barcelona)

 23 de mayo de 2025

La electrificación se ha convertido en una de las grandes protagonistas del debate energético actual. Tras el reciente apagón, el tema ha vuelto a los titulares y ha sacudido algunas certezas. ¿Podemos seguir confiando con la misma convicción en la electrificación como motor de la descarbonización? ¿Estamos preparados para reforzar su resiliencia y adaptabilidad? ¿Cómo cambia este escenario la toma de decisiones empresariales e industriales?

En un momento en que la opinión pública y los medios centran su atención en los efectos más inmediatos de esta interrupción, el Foro Industria y Energía (FIE) propone elevar la mirada hacia un horizonte más amplio. La transición energética, ese proceso complejo y multidimensional, no puede entenderse únicamente desde lo coyuntural. Requiere reflexión, estrategia y, sobre todo, capacidad para actuar sin esperar a tener todas las certezas.

Una cita para poner el foco en la dirección, no en la velocidad

En este contexto, el Foro Industria y Energía organiza y la mesa redonda “Alternativas renovables en procesos industriales de difícil electrificación”, que tendrá lugar el miércoles 4 de junio, de 15:00 a 16:00 horas, en la Sala Serveo del recinto ferial La Farga de L’Hospitalet (Barcelona), en el marco del evento Net Zero Tech 2025. La mesa, moderada por Albert Concepción, director del FIE, contará con la participación de Carlos Velázquez, director de Sostenibilidad y Relaciones Institucionales de Roca; Ignacio Cabané, responsable de la actividad de conexión a la red de gases renovables de Nedgia; y Manuel Fernández, responsable de proyectos de economía circular en Alier.

Un encuentro que busca aportar matices, compartir experiencias y plantear preguntas relevantes en un momento en el que, más que respuestas irrefutables, pretendemos aportar perspectiva. Los ponentes compartirán la experiencia de sus organizaciones a la hora de sortear el desafío de la difícil electrificación, aportando aprendizajes valiosos y enfoques concretos para abordar cuestiones clave como: ¿cómo se preparan las industrias para una matriz energética robusta y adaptable que combine diferentes fuentes y tecnologías? ¿Mantenemos la misma confianza en el proceso de electrificación después del apagón? ¿Cuáles son los criterios clave para la toma de decisiones sobre inversiones en descarbonización en el corto y medio plazo? ¿Y cómo se puede fomentar la colaboración entre la industria, los desarrolladores tecnológicos y los reguladores para superar las barreras actuales y futuras?

Transición energética: una maratón, no un sprint

La mesa llega en un momento clave, cuando la conversación pública se polariza en torno a certezas inmediatas. Pero quizá ese sea uno de los grandes errores en la comprensión de la transición energética: olvidar que estamos hablando de un proceso. Y, como todo proceso, no se completa de un día para otro. La urgencia climática exige acción, sí, pero no puede confundirse con la exigencia de inmediatez. La transición energética, por lo tanto, no puede enfocarse como una carrera de velocidad. Aunque con frecuencia puede parecer que se aborda así, en realidad se asemeja mucho más a una maratón de largo aliento. Y esta confusión conceptual no es trivial: afecta directamente a cómo diseñamos políticas, cómo destinamos los recursos y cómo evaluamos los resultados. Para una maratón se necesitan atletas con visión de largo plazo, capaces de gestionar el esfuerzo, regular el ritmo y adaptarse a las condiciones cambiantes del camino. El mérito no reside en la rapidez inicial, sino en la capacidad de alcanzar la meta.

“Difícil electrificación” no significa “electrificación imposible”

Este cambio de mentalidad implica algo incómodo, pero esencial: tomar decisiones. Y asumir que no todo es compatible. En ocasiones, hay que renunciar a ciertas opciones para poder avanzar con otras. También debemos aceptar que, en un escenario tan dinámico como el actual, buscar la perfección puede convertirse en una trampa. Como reza el adagio atribuido a Voltaire, «lo perfecto es enemigo de lo bueno». Si esperamos a tener la solución ideal, corremos el riesgo de no implementar ninguna. La obsesión por encontrar la tecnología definitiva puede tener un efecto paralizante. Se descartan opciones viables por no ser perfectas, se posponen decisiones por falta de certezas absolutas, se aplazan inversiones porque el contexto aún no parece “ideal”. Pero la transición no espera. Avanzar con lo disponible, asumir ciertas imperfecciones y entender que habrá que renunciar para poder elegir, forma parte del camino.

En esta carrera de fondo, la electrificación sigue teniendo un papel relevante, pero no exclusivo. En particular, existen procesos industriales de alta temperatura donde su implementación resulta sumamente compleja, si no imposible, con la tecnología actual. Es precisamente aquí donde entran en juego otras soluciones innovadoras que conformarán una matriz energética más robusta, diversificada y resiliente. No como atajos, sino como vías complementarias que, desde una perspectiva tecnológica abierta, pueden contribuir a alcanzar los objetivos comunes. Pero, además, teniendo muy presente que “difícil electrificación” no significa necesariamente “electrificación imposible” como demuestra el proyecto de Roca con sus hornos eléctricos, ya en funcionamiento en Europa y en proceso de implantación d ellos primeros en España.

Ambición sin realismo es ilusión. Realismo sin ambición, resignación.

La transición energética no es un relato lineal ni simple. Pero en ese carácter fragmentado, progresivo y lleno de decisiones difíciles, también hay una oportunidad para construir un modelo más sólido. No se trata de elegir entre fe ciega o inmovilismo perfeccionista, sino de avanzar desde el análisis sereno, la capacidad de adaptación y la acción compartida.

Nuestro debate en Net Zero Tech no aspira a obtener respuestas definitivas, pero sí a contribuir a una comprensión más enriquecedora de un proceso que marcará nuestro futuro industrial y energético. Porque la maratón continúa, y es momento de revisar la estrategia. El camino hacia la neutralidad climática exige una visión que combine ambición con realismo. En el Foro Industria y Energía apostamos por un debate constructivo que reconozca tanto los desafíos como las oportunidades de esta transformación histórica. Les invitamos a acompañarnos en esta reflexión colectiva sobre cómo hacer de la transición energética un proceso justo, eficiente y sostenible para todos los sectores de nuestra economía y sociedad.